Tiempo de Cuaresma
¿Por qué los viernes de Cuaresma no se come carne, además del ayuno y abstinencia del Miércoles de Ceniza y Viernes Santo?
¿Por qué los viernes de Cuaresma no se come carne, además del ayuno y abstinencia del Miércoles de Ceniza y Viernes Santo?
En primer lugar es importante recordar que no es un invento de la Iglesia, sino que Jesús ya dijo que sus discípulos ayunarían cuando él partiera (Lc 5:35). Es un mandato divino que la Iglesia se ha encargado de concretar debidamente para que los cristianos lo puedan llevar a cabo. Así lo recoge el Código de Derecho Canónico.
Canon 1250: En la Iglesia universal, son días y tiempos penitenciales todos los viernes del año y el tiempo de cuaresma.
Canon 1251: Todos los viernes, a no ser que coincidan con una solemnidad, debe guardarse la abstinencia de carne o de otro alimento que haya determinado la Conferencia Episcopal; ayuno y abstinencia se guardarán el Miercoles de Ceniza y el Viernes Santo.
Canon 1252: La ley de la abstinencia obliga a los que han cumplido catorce años; la del ayuno, a todos los mayores de edad, hasta que hayan cumplido cincuenta y nueve años.
Canon 1253 La Conferencia Episcopal puede determinar con más detalle el modo de observar el ayuno y la abstinencia, así como sustituirlos en todo o en parte por otras formas de penitencia, sobre todo por obras de caridad y prácticas de piedad.
Pero ¿Por qué no se puede comer carne y no otro alimento? Se trata de mantener vivos los símbolos: la carne representa al cuerpo de Cristo crucificado y es por eso que se evita consumir cualquier tipo de carnes hasta la resurrección de Jesús. Normalmente el sustituto perfecto para ello es el pescado, y es muy importante recordar la importancia del pez en el cristianismo, símbolo de la verdad profunda (en el agua) que se oculta para se atrapada y salir a luz. Los apóstoles son pescadores en su mayoría y a Jesús se le representa como el guía a la verdad. El vínculo entre Jesús y el pez se culmina en el baño del baptisterio (piscina que en realidad significa estanque de peces y la parábola de los pescadores. Además de la multiplicación de los peces y otros signos más que recogen las escrituras. Más tarde los primeros cristianos usarían el ichtus o ichthys.
Esta penitencia corporal de ayuno y abstinencia no debe ser llevada con tristeza, sino más bien con la alegría del que sabe que Jesús morirá por sus pecados, resucitando al tercer día, para después, llegado el momento, podamos estar con Él en su Reino.